Pondrán candado a desarrolladores

El regreso a clases se ha convertido en un dolor de cabeza para las autoridades de todos los órdenes de gobierno: los espacios disponibles resultan insuficientes para atender a la población en edad escolar. Mientras durante el año las comunidades crecen y los desarrollos habitacionales proliferan, los constructores buscan resquicios legales para no entregar las escuelas que les obligan algunas normas.
Así, cada año, el primer día de clases hay que buscar el acomodo para pequeños como los de San Clemente de Lima, donde el secretario general de gobierno en Nayarit, Roberto Mejía Pérez, tuvo que intervenir para lograr que la Secretaría de Educación Pública del Estado de Nayarit (SEPEN) se comprometiera a brindar los servicios de primaria usando las instalaciones de un jardín de niños en el horario vespertino.
Para evitar situaciones como esta, el diputado local Rafael Cervantes Padilla se pronunció en favor de realizar reformas a las leyes estatales y los reglamentos municipales, que establezcan mecanismos de control para hacer cumplir a los desarrolladores.
“Vamos a proponer otra iniciativa para que todos los desarrolladores construyan primero las escuelas que las casas que venderán. Porque siempre resulta que dejan ese problema a las autoridades educativas y a los presidentes municipales. La fracción del PAN en el Congreso local, buscará que si no prosperan las reformas, por lo menos se emita un exhorto”, aseguró.
El diputado y líder de la bancada del blanquiazul reconoció que las leyes en materia de Desarrollo Urbano son claras respecto a las responsabilidades de las empresas constructoras; sin embargo, dice, estas deben endurecerse pues se ha comprobado que los empresarios buscan pequeños resquicios para evadir su responsabilidad social.
“Los desarrolladores violan la ley, la tuercen a su favor. Si se marca que deben construir una escuela por cada 300 casas, construyen 299 para no alcanzar la norma. Entonces debemos de ser más duros, porque luego el magisterio y los Ayuntamientos reciben el caos de no tener donde meter los niños a estudiar”, concluyó.