Se dividen panistas

“El pleito no es con Ismael”, dice el regidor Edmundo Oregón Cruz, quien junto con sus compañeros Ramiro Pérez Soto y José de Jesús Arreola Bernal emitió una misiva el pasado lunes para desligarse de las acciones y declaraciones de la Delagación Municipal, a la que entre otras cosas acusan de haberles impuesto a Ismael Duñalds como coordinador y a Juan Manuel Almejo como asesor.
Oregón, Arreola y Pérez señalan que Ismael Duñalds era el miembro con menor antigüedad en las filas de Partido Acción Nacional (PAN), apenas desempacado de su filiación priista. No obstante, dice Ramiro Pérez Soto, no es esa la molestia sino el que no se haya tomado en cuenta a los ediles electos para tomar esa decisión.
“Nos llamaron de la delegación que para una junta. Y llegando nos dan un escrito en donde dice que Ismael es el coordinador; que así lo mandó Tepic y que son órdenes de arriba. Nos pareció raro, pero lo aceptamos en su momento. Lo malo es que desde la delegación se siguen haciendo cosas sin tomarnos en cuenta”, explica Pérez Soto.
Señalan que otro motivo de conflicto han sido las aportaciones al partido. Aunque tanto Oregón como Pérez Soto dicen que no se niegan a pagarlas, señalan que se había hecho un acuerdo con la delegación para destinar una parte de lo que les tocaba, para la asistencia social.
“Nos llamaron a Chuy (Arreola) y a mí, porque con Edmundo nunca han querido saber nada. Entonces nos dijeron que nos tocaban mil 600 pesos quincenales, pero ahí mismo se tomó un acuerdo de que ante la falta de apoyo del Ayuntamiento se destinara una parte para asistencia social, para gestión, y que esa parte se tomará a cuenta. Quedamos que daríamos entonces mil pesos a la quincena”, dice Ramiro.
Edmundo Oregón asegura que cuando se presentó a pagar lo que adeudaba, en la delegación se negaron a recibirle el dinero. Lo hicieron una vez, entonces, Juan Manuel Almejo declaró que Oregón Cruz lo había obligado a extenderle los recibos, en consecutivo, por la cantidad que él quiso.
“Eso no es cierto, yo sólo pedí que me respetaran el acuerdo que habían hecho con los demás. Entonces me dijeron que yo tenía que ir a firmar un convenio con la Delegación Estatal. Les dije que no era justo. Me presente después y ya no quisieron recibirme mis cuotas, están buscando poner manchas en mi expediente porque siempre les he sido incómodo porque he demostrado que tengo con qué ganar elecciones”, asegura Oregón Cruz.
La gota que derramó el vaso, dicen, fue la entrega que se hiciera en El Colomo de recursos del programa federal 70 y Más, al que la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) invitó a Ismael Duñalds. La no invitación para los otros tres regidores fue leída como una afrenta.
“Para empezar eso es ilegal, no se puede lucrar políticamente con los recursos de la federación. Sabemos que los mismos priistas lo hacen; entonces lo menos que pudo hacer la delegación fue invitarnos a todos”, concluye Oregón Cruz.

Otros intereses

Para el regidor Edmundo Oregón Cruz, la culpa no recae en Ismael Duñalds, sino en el grupo de Rodolfo Álvarez Tostado, quien tiene en María de Jesús Ruiz Pineda y el resto de los integrantes de la delegación municipal, una estrategia para mantener el control del partido en el municipio. Desde su punto de vista, ellos actúan para proteger los intereses del empresario.
“Ismael no tiene la culpa, lo están utilizando, enfrentándolo a nosotros. Pero ese grupo antes ya ha hecho muchas transas para mantener el control del partido. Yo, por ejemplo, he pasado cinco veces la prueba para convertirme en miembro activo, la hice junto con mi madre y luego con mis hermanos que no les interesa la política, ellos son miembros activos y a mí me borran de la lista”, asegura Edmundo.
Denuncia que no sólo a él, sino a muchos panistas contrarios a los intereses de Álvarez Tostado los han eliminado del padrón. Pone el caso concreto de uno de los fundadores y tío de Ramiro Pérez Soto. “A mi padre, a don Félix, que también es fundador, ya varias veces lo han querido expulsar también”.
Oregón Cruz dijo que las diferencias ya son profundas y que para poder trabajar con unidad los tres regidores inconformes sólo ven una solución: cambiar a los integrantes de la delegación y al coordinador de la bancada.
“Después de las elecciones nos reunieron como cuatro o cinco veces para hacer el cambio de la delegación. Estuvimos trabajando y pensamos que después de ese trabajo vendría una designación de una delegación incluyente, en donde las fuerzas estuvieran verdaderamente representadas por su peso popular, pensábamos que el partido ahora sí iba a crecer. Luego vino la designación de María de Jesús, esposa del anterior delegado, y de pura gente de Álvarez Tostado. Sencillamente no estamos de acuerdo”, concluye Oregón Cruz.

“No estoy aferrado al puesto”: Duñalds

A Ismael Duñalds no le quita el sueño dejar la coordinación de la bancada panista en el Cabildo de Bahía de Banderas. El edil asegura que él no la pidió y que está consciente de que si su trabajo no es bueno tiene que acatar las órdenes de la cúpula blanquiazul. Sin embargo, hay una precisión que estima debe hacer.
“A mí la designación como coordinador no me la dio la Delegación Municipal, vino del estado. Entonces, si la delegación estatal piensa que estoy haciendo mal las cosas tendré que dejarla. No me preocupa, no me interesa el puesto tanto como servir a la gente, hacer las gestiones que estén en mis manos”, dice Duñalds.
No obstante, el regidor advierte que los tres inconformes podrían estar actuando en contra del partido, debilitándolo de la misma forma que ellos aseguran que la delegación municipal lo hace.
“Lo que me queda claro es que de lo que se trata de es golpear a Maylo. Nos hemos convertido en una puntilla incómoda para el presidente municipal, no sólo porque no votamos las cosas como él quisiera sino porque hacemos los señalamientos, no nos quedamos callados. No sé que le dirían a mis compañeros, pero el objetivo de estos ataques sin duda son para debilitarme y debilitar así al partido”, dice.

El mismo objetivo, diferente visión

Ismael Duñalds pone el dedo en la yaga: “lo que quieren es conseguir que se vote todo a favor del alcalde, Héctor Paniagua, sin contratiempos y con esto lo están logrando. Yo puedo renunciar a la coordinación de la bancada, a lo que no puedo renunciar es a mi espíritu crítico. Tenemos que defender los intereses de la gente que votó por nosotros, de la gente del pueblo, no los de los gobernantes. Si ellos quieren votarle las cosas negociadas, aunque permanezcamos en el mismo partido yo no me plegaría a esos intereses, tendría que votar por lo que beneficia a la gente”, dice.
Edmundo Oregón lo ve de otra manera, pero con el mismo objetivo; beneficiar a la gente. “No podemos oponernos a lo que beneficia a la gente, aunque este beneficio venga del PRI. Pongo el caso de la permuta para el terreno de Mezcalitos, esa calle benefició mucho a la gente que votó por mí, si la negociación para la permuta, que no está mal hecha, la hizo el presidente, yo no me puedo oponer porque es un beneficio”, dice.